miércoles, 27 de agosto de 2025

NEGACIONISMO ECOLÓGICO

 

LA CAUSA QUE ESTÁ DETRÁS DE LOS GRANDES INCENDIOS FORESTALES

Esta es la opinión de ingeniero forestal que ha trabajo durante tres décadas gestionando montes en la administración forestal andaluza y tiene experiencia en la extinción de incendios.

    Actualmente en España se produzcan los incendios más grandes de toda Europa. Siguiendo las estadísticas la virulencia y el tamaño de los incendios no ha dejado de crecer desde la década de los 70 del siglo pasado.



 Muchos, empezando por el Gobierno, quieren hacernos creer que la causa de los llamados incendios de 6ª generación (denominación, por otro lado, ridícula) es el cambio climático. Si esto fuese así, tendríamos un referente del nuevo clima, tal vez Marruecos que está más al sur, pero no es así.

 Si analizamos con cierta seriedad los cambios que se han producido en pongamos los últimos 50 años, en nuestros campos y montes, veremos una transformación total de los usos y ocupación del territorio, mientras que el clima  local ha variado  bastante poco. Por tanto, ante la constatación del abandono de prácticas tradicionales de recogida de leñas, del pastoreo, de los pequeñas explotaciones agro-silvo-pastorales tradicionales. En definitiva, de una modificación muy sustancial del ecosistema agrario y forestal, es estúpido no reconocer que esto no vaya a tener consecuencias. Esta es la verdadera realidad incomoda,  en donde se encuentra el verdadero negacionismo.

Siguiendo la perspectiva del movimiento ecologista, su conocimiento de los sistemas ecológicos es irreal, ya que pretenden excluir  a las gentes del campo. Demuestran su total ignorancia de los ecosistemas mediterráneos que se han formado con el ser humano dentro,  durante el Neolítico. Diría más, el nuevo modelo que pretenden crear, sin los usos tradicionales,  introduce por la puerta de atrás igualmente el factor antrópico pero ya no como parte integrante del sistema, es externo a él y en consecuencia produce un desorden de consecuencias caóticas e imprevisibles, impactando con la contaminación de las zonas industriales y urbanas, además del uso lúdico y recreativo.

 


  Hagamos un breve repaso de las causas objetivas de que se produzcan incendios más grandes:

 

Estado forestal

 

Ø  Superficie forestal(1): España cuenta con la mayor superficie forestal de la UE, después de Suecia, prácticamente la mitad de la superficie del país es forestal. Asimismo cuenta con la mayor superficie de monte público (un 30 % de la superficie forestal aproximadamente). También es de destacar que  la superficie forestal protegida es mayoritaria puesto que además de todas las figuras de protección europea,  estatal y autonómica,  añadimos  los montes públicos dada la alta protección que le otorga la legislación actual que los equipara con bienes de dominio público.

 

Ø  Baja explotación: Tenemos unos niveles de explotación muy bajos comparados con otros países como Francia, Alemania, Suecia o Finlandia que mantienen la mayor parte de sus masas forestales orientadas a la extracción de madera y biomasa combustible. La ordenada gestión del bosque con aprovechamientos, reduce significativamente el daño de los incendios, al disminuir la carga y la continuidad vertical y horizontal del combustible. La baja explotación de nuestros montes es en parte derivada de la protección del monte pero también de una escasa rentabilidad debido a las malas comunicaciones (distancias, orografía) y porque los productos se han depreciado mucho por la competencia exterior.

 Ni que decir tiene que un monte rentable y explotado  libra a la administración de tener que hacerse cargo de las labores preventivas.

Ejemplos de explotación sostenible tradicional en España  son raros, pero podemos señalar algunos montes comunales(2) o de mano común explotados por los vecinos desde hace siglos para la producción de madera en Castilla.  Este es un ejemplo de fijación de población en un territorio, conservación del patrimonio natural y sin duda de preservación del monte del fuego.

 

 Vegetación

Una de las características propias de la vegetación natural de nuestros montes es su adaptación a fuego, por eso se dice que es amiga del fuego: pirófita.  Los pinos mediterráneos (especialmente carrasco y negral) producen resinas muy inflamables. De la especial adaptación a fuegos repetidos (cada 20 años por ejemplo) da muestra el que mantienen dentro piñas secas de años anteriores un banco de semillas y estas piñas son especialmente inflamables como sabe todo el que dispone de ellas para encender la chimenea.

Otra adaptación al fuego es ser resiliente, por ejemplo el pino canario es el único que rebrota y no muere al quemarse. Mientras que las especies nobles que están con nosotros desde el terciario,  acumulan reservas en la base del tronco y tienen una gran capacidad para brotar de cepa después de quemada la parte aérea. Ejemplos son madroño, mirto, lentisco, acebuche y por supuesto las quercineas como encina, alcornoque, quejigos y roble mejolo. En el caso del alcornoque, su corcho es una clara adaptación al fuego.

 Algunas especies han evolucionado para perpetuarse mediante el fuego muy repetido, como aulagas y jaras. De estas últimas tenemos en la mitad occidental la jara pringosa, llamada así por presentar en verano una resina muy inflamable cubriéndola (el ládano). Curiosamente el jaral  decae si no hay incendios, llegado el momento las viejas jaras mueren  sin renovación  porque las semillas necesitan del fuego para germinar, y dan paso a otras especies.

 

 Clima

El clima mediterráneo se encuentra presente en otras zonas del mundo pero sin gran extensión ( por ejemplo California, zona de Valparaiso en Chile, El Cabo en Sudáfrica y extremo sur de Australia). Lo que caracteriza a este clima es un verano seco y caluroso, en contraste con un invierno suave y húmedo.  Por tanto, se da una combinación perfecta para que durante el invierno se cree pasto que arda en verano, especialmente cuando se juntan las condiciones de baja humedad ambiental, viento y altas temperaturas.

 Sin embargo, el fuego natural en la mayor parte de nuestros  montes mediterráneos es  poco frecuente pues no suele haber tormentas de verano.  Por tanto, la especial adaptación del monte al fuego debe responder al uso desde épocas remotas del fuego como forma de abrir el monte cerrado al pasto del ganado y para la roturación rotacional de pueblos nómadas. Este proceso de  adaptación se produce en el momento en que se va estabilizando el clima mediterráneo actual, no olvidemos que el Neolítico es consecuencia directa del último gran cambio climático.

 Visto con perspectiva, el proceso  de formación del monte mediterráneo no ha sido uniforme, ni en el tiempo ni en el territorio,  por eso encontramos alteraciones importantes en las que un tipo de formación u otra han dominado con alternancias como pinares o robledales. Los datos aportados por las muestras de polen fósil distan mucho del ideal de bosque clímax permanente. En buena lógica estas modificaciones que calificamos como naturales deberían de seguir ocurriendo,  aunque solo fuese porque  el clima presenta una continuada  alteración.

  

Uso del suelo

Volviendo a lo dicho con nuestra vegetación mediterránea, es admitido que está adaptada a la explotación, especialmente al uso del fuego y aprovechamiento del  ganado.  Pero mientras de forma natural se daban las condiciones para los prados de climas atlánticos y algunas zonas húmedas de montaña, incluso por una vegetación ya preadaptada  a los grandes pastadores (bisontes o mamuts)  de la última era glacial, actualmente no hay pastadores salvajes equivalentes, los ciervos, cabra montés o corzos son ramoneadores. Esto era imposible en el clima mediterráneo, y se llegó a una solución de compromiso que fue la explotación del pasto temporal bajo arbolado, pero este difícil equilibrio creado por nuestros antepasados que llamamos dehesa(3) se rompió con el tractor, cerramientos y suplementos en forma de piensos industriales. Otra muestra de cómo el monte mediterráneo es resultado de la cultura y de cómo no entenderlo nos lleva al desastre ecológico.

 El abandono de la dehesa es muy sintomático, ya que el suelo se cubre de especies que son indicadores de un alto grado de degradación como la jara que, como se indicó, propaga el fuego con suma facilidad.

 El paisaje tradicional apenas cambió durante siglos hasta mediados del siglo XX con el abandono de la trashumancia primero, la aparición del tractor  y  el éxodo del campo a la ciudad que aún hoy continúa y que en sí, ejemplifica el problema. Lo que llaman los políticos la “España vaciada”.

 Hace un siglo, los incendios no eran el gran problema ya que casi todo el territorio estaba sometido a cultivos y  extracción de leñas para carboneo,  incluso aulagas y jaras fueron aprovechadas en  panaderías y los hornos de los tejares.  El espacio forestal estaba muy compartimentado,  con un complejo de setos, herrizas, huertos, prados para el ganado y monte adehesado que rompían la continuidad del fuego. Un año como este de 2025, bajo las mismas condiciones climáticas favorables para los incendios no hubiese  tenido las actuales consecuencias. Me refiero a una primavera especialmente húmeda, que en lugar de un problema para el verano, hubiese sido una bendición hace décadas,  aprovechándose el pasto que no habría llegado a agostarse espigado y alto, favoreciendo el fuego como ha ocurrido. Entonces ni había ni podían permitirse la compra de piensos, y el mantenimiento del ganado implicaba el movimiento comarcal o  aprovechando los pastos y rastrojos; e incluso lejos con la trashumancia.  Las vías pecuarias están ahí, no es leyenda.

 La mejor manera para entender la causa de los incendios es comparar los montes andaluces con los similares por clima, suelo, orografía y vegetación,  que se encuentra al norte de Marruecos(4) con unos usos como los de hace un siglo aquí, por eso allí no se producen estos incendios gigantescos. Esto desmonta la falacia de que es el cambio climático el responsable.

 Las causas de los incendios  hoy son múltiples, pero muchas asociadas a actividades nuevas como el uso recreativo de las gentes de la ciudad. Así en Andalucía se prohibieron el uso de  las barbacoas  en las áreas habilitados  para este fin durante el verano. Por otro lado, el incremento del senderismo y acampada es un riesgo potencial importante, solamente hay que ver la basura abandonada para darse cuenta que los senderistas no van a ser especialmente cuidadosos con materiales potencialmente iniciadores como colillas o cristal,  ni aún con el uso del fuego, aunque esté prohibido. Otro origen de incendios por descuido se debe a la actividad en viviendas de fin de semana, usando como antaño el fuego para desbrozar o limpiar la maleza del huerto, sin las precauciones debidas.

 Una causa muy frecuente es la de fuegos producidos por accidentes o descuidos con motores térmicos o máquinas que sueltan chispas, tanto eléctricas como por en piedras de cuarzo como es el caso de aperos del tractor. Aquí tenemos una casuística que va desde trabajos forestales, agrícolas, obras públicas, mantenimiento de líneas eléctricas, etc.

 

 Administración

La consecuencia directa de que tengamos tantos montes con riesgos cada vez más elevados de grandes incendios  se debe primero  a la necesidad de unas labores de prevención y después  de extinción. Lo pongo en este orden para que se entienda mejor aquello de más vale prevenir. Sin embargo, en nuestro país las comunidades autónomas dedican mucho más dinero a la extinción.(5) Esto produce una disfunción laboral y social, pues los bomberos trabajan mayoritariamente de forma temporal, que no parece ni lo digno ni lo adecuado para mantenerlos en forma. El que haya trabajado en extinción (el que escribe lo ha hecho) conoce las penalidades de moverse por el terreno accidentado de nuestros montes bajo la presión del humo y las llamas, queremos que tengan superpoderes  en verano y el resto del año los dejamos aparcados.

 Una gestión eficaz haría que este personal estuviese todo el resto del año  trabajando en  el monte en prevención y en extinción en verano. Preparándose, conociendo con detalle el terreno.

 Aunque lo razonable, tal como lo indican la mayoría de los técnicos en la materia, es dedicar más dinero a la prevención, dado que la necesidad de trabajos por la administración en el monte es mayor por los motivos anteriormente expuestos.  Al ser el presupuesto limitado, se debería derivar una parte del costoso presupuesto de extinción a la gestión preventiva con el mismo personal, con lo que habría una mejora en la eficacia y reducirían los costes. Hay que decir que no por gastar más directo en helicópteros se apagan antes los grandes incendios, es más, a veces ni siquiera es posible usar los costosos medios  aéreos (de noche o con fuerte viento), y tampoco puedes arriesgar la vida de los brigadista cuando no cuentan con unas mínimas garantías de seguridad. Y estas condiciones son ya intrínsecas de muchas zonas por relieve o falta de accesos, en dónde lo único prudente es dejar que se queme el monte y no exponer inútilmente a los bomberos.

 En España, y siguiendo el articulado de la Constitución, las competencias en situaciones de emergencia como estos grandes incendios  y aún más si rebasan los límites de una comunidad autónoma es del Estado. El mismo Gobierno de la Nación se contradice cuando acusan al cambio climático global, un problema que por definición rebasa los límites de la comunidades autonómas.

 En todo caso  los incendios grandes siempre han de ser supervisados por el Estado, y éste contar con buena parte de los medios de extinción,  bien porque sean suyos como que se pongan a su disposición los de las CCAA. Esto es así, dado que en primer lugar el Estado está obligado a proporcionarnos la protección sin importar en qué lugar de España vivamos (art. 5.2 Ley 17/2015(6)  y 139.1 CE): en segundo lugar, porque los medios son dispares como lo son las mismas CCAA, no pueden compararse por ejemplo La Rioja y Castilla León, por ejemplo. Y no tiene sentido que los medios estén disponibles y parados a la espera que rebasen el límite regional, cuando la intervención es más eficaz en las primeras etapas de un incendio, es preferible ayudar a la comunidad limítrofe en su territorio y extinguir allí el fuego que no dejarlo que se convierta en un monstruo cuando entré en tu territorio. Pero esto, es algo que no depende las CCAA, sino de la obligada coordinación del Estado(7).

  

Política

 Por desgracia el enfoque de los políticos no va a ser el correcto, alejándose de la solución. A ellos no les interesa escuchar a los técnicos independientes, solo miran para sus propios intereses, no enfocan en la realidad sino en lo que quieren que creas: su partido tienen la solución a todos los males que son creados por los otros partidos. No hay más.

 Es ridículo que se culpe al cambio del clima, que es algo apenas significativo en estos últimos 40 años, comparado con la descomunal transformación del paisaje abandonado de nuestros montes y campos. ¿Creen ustedes que  es gracias  a los políticos marroquíes que no hay grandes incendios en el Rif?  Es indignante cuando se hace para exculpar la responsabilidad y transmitirnos, una vez más,  que tampoco tienen la solución. Puesto que  un pacto de estado contra el cambio climático tiene el mismo sentido que hacer un pacto contra la malaria, las guerras, o la violencia.

 Sacar el cambio climático  de paseo  no es muy distinto a hacerlo con la virgen para que llueva. Si llueve será la virgen y si no también.

 

  

Notas:

  (1) En España la superficie forestal ocupa el 55% del territorio nacional  siendo monte público el 30%.  Los datos de Andalucia (IMA 2023) EL 50.7%   de la superficie de la comunidad autónoma es forestal y de esta algo más del 25% monte público.

 (2)Hay que decir que los derechos de los pueblos sobre los montes son de origen medieval ( del derecho germánico de los visigodos mayormente) y durante siglos han sido atacados por municipios y el Estado haciéndolos perder la condición legal original. En la actualidad son las propias legislaciones autonómicas las que intentan acabar con este derecho ancestral.

 (3) La dehesa tradicional  como sistema etás literalmente muerta porque no se regenera, el árbol sufre y entra en decaimiento, debido a cambiar su uso manteniendo el ganado todo el año con cargas elevadas dentro de cerramientos, usando la grada del tractor para mantener al matorral, etc.

 (4) De aquella época lejana del protectorado, aún había recuerdos  de algunos viejos funcionarios del cuerpo de montes que trabajaron en Marruecos  gestionando los montes públicos. A propósito, este país  nos envió dos aviones anfibios Canadair para ayudar a combatir esta ola de incendios de agosto de 2025.

 (5)  En el caso de Andalucía ( datos IMA 2023) la gestión preventiva  es de 36 Millones  y la  extinción 140 Millones.

 (6) Ley 17/2015, de 9 de julio, del Sistema Nacional de Protección Civil.

Artículo 5. Derecho a la protección en caso de catástrofe.

...

2. Los poderes públicos velarán por que la atención de los ciudadanos en caso de catástrofe sea equivalente cualquiera que sea el lugar de su residencia, de conformidad con lo establecido en el artículo 139.1 de la Constitución.

 

(7)   Definición. Son emergencias de interés nacional:

 

Artículo 28.

...

2. Aquellas en las que sea necesario prever la coordinación de Administraciones diversas  porque afecten a varias Comunidades Autónomas y exijan una aportación de recursos a nivel supraautonómico.

 Artículo 29. En los supuestos previstos en el artículo anterior, corresponderá la declaración de interés nacional al titular del Ministerio del Interior, bien por propia iniciativa o a instancia de las Comunidades Autónomas o de los Delegados del Gobierno en las mismas.

 

 

miércoles, 13 de agosto de 2025

LA FRAGATA VENCIÓ AL ACORAZADO

 

Introducción

Las líneas clásicas de los navíos de guerra del periodo que va desde la Primera a la Segunda Guerra Mundial fueron consecuencia del innovador battleship HMS Dreadnought puesto en servicio en 1906. En este diseño del acorazado se buscó maximizar la protección y potencia de fuego en un barco, con la mayor velocidad posible; siendo su características distintivas una artillería principal de un único gran calibre con una disposición de los cañones(1) en torretas alineadas al eje del buque o línea de crujía, con uno o dos torretas  en popa  e igualmente en proa. Este modelo será copiado para el resto de los buques avivando la carrera armamentística, principalmente entre el  Reino Unido y el Imperio Alemán, pero con repercusión mundial, convirtiendo a los nuevos acorazados en el símbolo del poderío naval.

Pero los acorazados fueron demasiado valiosos e incapaces para muchos de los cometidos que  requería el almirantazgo, para estos fines las armadas fueron utilizando los versátiles cruceros o los ligeros destructores. Después de la IIGM,  con el desarrollo de la aviación primero y la aparición del misil después, quedan fuero de juego los grandes navíos y se prefieren buques pequeños y móviles.

USS Texas. El más antiguo de los dreadnought de EE. UU. que ha sobrevivido, el USS Texas, entró en servicio en 1914, y es en la actualidad un buque museo (Wikimedia Commons)


Auge y acaso de los acorazados modernos

El impacto del HMS Dreadnought fue total, ya que a sus características propias de pegada y protección se le unía una velocidad que superaba al de algunos de los cruceros de la época. Esto era posible por el empleo de turbinas de vapor Parson que antes ya se habían implementado en barcos rápidos como los destructores,  pues proporcionaban alta velocidad con una planta motriz de tamaño más reducida que si se emplease el motor alternativo.

Todo este proceso era consecuencia del rápido desarrollo tecnológico. Así, hasta la entrada del siglo XX, el arma decisiva fue el cañón de calibre medio, usualmente de 152 mm (6 pulgadas), capaz de realizar fuego rápido a una distancia relativamente corta, ya que la artillería naval de grueso calibre era demasiado imprecisa a largas distancias y presentaba una baja cadencia de disparo. Pero los almirantes británicos y estadounidenses preveían que los futuros acorazados entrasen en combate a mayores distancias, a medida que el alcance de los torpedos se fuese incrementando. Durante la  batalla de Tsushima en 1905 quedó confirmado  el  incremento del alcance efectivo de la artillería pesada, de tal forma que en todas las armadas, el calibre se incrementó y el número de cañones en cada barco tendió a reducirse para compensar. El menor número de cañones resolvió la cuestión de la distribución y las torretas en la línea de crujía se convirtieron en la norma, colocando a veces los cañones de forma escalonada para reducir el largo del casco, especialmente a partir de las nuevas clases de acorazados denominados superdreadnoughts.

La transición al armamento monocalibre fue adoptada debido a las ventajas que el armamento pesado ofrecía tanto en potencia como en control de fuego. Los nuevos cañones de 305 mm eran capaces de provocar más daños y tenían mayor alcance que las piezas de 254 o 234 mm. Otras ventajas  que ofrecía un armamento pesado uniforme era la simplicidad logística y una racionalización de la dirección de tiro, sólo sería necesario realizar una única serie de cálculos para el ajuste del alcance del disparo. A largas distancias, las piezas eran apuntadas observando las columnas de agua que levantaban los proyectiles al impactar contra el mar. En el caso de abrir fuego con piezas de varios calibres, no se podía discriminar el origen del disparo.

Los primeros dreadnought tendían a portar unos cañones ligeros como armamento secundario destinados a protegerse de las lanchas torpederas  que solían atacar de forma separada de las acciones de cualquier flota. Por lo tanto, no había necesidad de blindar el armamento secundario ni de proteger a la tripulación de los fogonazos producidos por el armamento principal. Pero en unos pocos años, la mayor amenaza provenía de los destructores, más difíciles de destruir que las lanchas torpederas y que requerían también del uso de la artillería principal. Esto implicaba proteger los cañones dentro de torretas y aumentar el calibre, pero el armamento secundario de los dreadnought fue, en general, insatisfactorio. La única forma totalmente segura de proteger un dreadnought de destructores o de ataques de torpederos, era escoltarlo con su propio escuadrón de destructores o cruceros ligeros. Tras la Primera Guerra Mundial, el armamento secundario tendió a ser montado en torretas en la cubierta superior y alrededor de la superestructura dispuestos en su mayoría como parte del sistema de protección antiaérea, incrementándose la adopción de cañones de propósito doble y elevados ángulos de tiro.

La consecuencia inevitable de la demanda de velocidades, potencia de fuego y protección, significó que el desplazamiento y coste de los buques tendiese a incrementarse. El Tratado naval de Washington de 1922 limitó a 35 000 toneladas el desplazamiento de los buques capitales. En los años siguientes se encargó la fabricación de numerosos barcos que se ajustaban a los límites del tratado. Sin embargo, la decisión de Japón de abandonar el tratado en la década de 1930 y el comienzo de la Segunda Guerra Mundial hicieron irrelevantes las limitaciones.

Estos grandes cañones se montarían, además de en los acorazados,  en los cruceros de batalla. Estos barcos eran incluso de mayor tamaño, buscaban una ventaja en su mayor velocidad a costa de reducir algo el blindaje. Como el tratado de Washington(2), que limitaba el numero de grandes buques, igualaba ambos, algunos cruceros de batalla fueron reconvertidos en portaviones.

Pero las flotas de estos colosos fue más un factor disuasorio que una fuerza de acción, dado el riesgo que podría suponer exponerlos a su irreparable pérdida. Solamente cuando se creyó que era posible la batalla decisiva como la victoria japonesa en Tsushima, que erróneamente quisieron replicar los japoneses(3). No parecía buena estrategia incluso asentando un golpe mayor a la flota enemiga, como en la batalla de Jutlandía en la IGM, Alemania se quedó sin la carta ganadora para futuros enfrentamientos y salvo los submarinos encargados de atacar las rutas comerciales, la flota Alemana permaneció en puerto hasta el final de la guerra.

Detrás del concepto del acorazado se encontraba la búsqueda de inmunidad de la superestructura. Para ello se colocaba una gruesa coraza lateral además de un cinturón antitorpedo. Con el mayor alcance de las baterías el ángulo de caída de los proyectiles  se elevó  pudiendo caer detrás de la placa exterior y golpear directamente las estructuras internas, pero no se considero determinante, no obstante, nunca estuvieron protegidos para resistir la penetración de bombas de aviación(4).

Se suele señalar como signo del ocaso del acorazado la pérdida del moderno HMS Prince of Whales en las costas de Malasia por la aviación japonesa sólo dos días después del ataque a Pearl Harbour. Curiosamente este navío había acompañado al enorme crucero de batalla HMS Hood el día en el que el Bismark literalmente lo reventó con un disparo de estos proyectiles de caída parabólica en la Batalla del Estrecho de Dinamarca el 24 de mayo de 1941. La venganza no se hizo esperar gracias a la superioridad naval británica, incluida aviación, siendo el acorado alemán cazado y hundido solamente 3 días después.

Años después llegará el final al Yamato y Mushashi, los acorazado más pesados y fuertemente armados jamás construidos(5) de 72.800 toneladas de desplazamiento a plena carga y nueve cañones de 460 mm.

El final del  gigante Yamato, el 7 de abril de 1945, también fue obra de la aviación en un corto espacio de tiempo que va desde el primer ataque a las 12:37 hasta su explosión a las 14:23, el Yamato había recibido el impacto de once torpedos y ocho bombas. Mientras que su hermano de clase, el Mushashi, recibió aún mayor castigo con el impacto de diecisiete bombas y diecinueve torpedos durante la batalla del Golfo de Leyte el 24 de octubre de 1944.

El hundimiento del SMS Szent István, después de recibir los torpedos de lanchas torpederas italianas. ( Bundesarchiv, Bild 134-C2280 / CC-BY-SA 3.0)


 Los cruceros

El término crucero aparece entorno a 1870 para referirse a un tipo de buque con escaso blindaje, pero rápido y bien armado, capaz de detener en caso de guerra el tráfico mercante enemigo o de proteger las rutas marinas coloniales propias en ultramar en caso de necesidad.

Dejando de lado los cruceros de batalla, en muchos aspectos similares a los acorazados, los puntos fuertes de estos buques será sus altas capacidades en maniobrabilidad, velocidad y cadencia de disparo;  es por tanto el navío con las características más amplias y versátiles, siendo en las flotas complementarios de los acorazados o portaviones al defenderlos ante destructores y cruceros enemigos.

Las líneas elegantes  de los cruceros ligeros de la II GM son el clásico de unos barcos con una disposición de los cañones en torretas ubicadas en la línea de crujía y superpuestos, de forma similar a los acorazados pero de calibres inferiores.  Las 10.000 t de desplazamiento y 155 mm, se fijó como referencia máxima para los cruceros ligeros impuesto por el Tratado de Washington. Por ejemplo la clase Fiji británica con 4 monturas triples de 6 pulgadas contando con dos lanzadores triples de torpedos. Una de las funciones de estos barcos fue la de servir de líder de flotillas de destructores.

Mientras que en caso de los acorazados su batería principal evolucionaba solamente para aumentar su capacidad de penetración en el blindaje del enemigo. En los cruceros se jugó  con las diferentes posibilidades, podía optarse por un gran calibre y cañones largos para incrementar la velocidad en boca, que ofrecían más alcance y capacidad de penetración. Pero las pesadas torretas de los cañones de gran calibre, tenían un giro muy lento y a largas distancias disparaban en tiro parabólico (apuntando con mayores ángulos), volviéndose inútiles contra objetivos cercanos. Las mejoras hicieron que los cañones más ligeros pudieran moverse rápidamente hacia su objetivo y disparar un verdadero chorro de proyectiles cuyo trazado facilitaba la puntería sin necesidad de cálculos o uso de radar.

Los cruceros pesados podían tener cañones mayores (normalmente de 8 pulgadas) pensados para destruir a otros cruceros y sirvieron de escolta en el Pacífico a los portaviones, dado que los acorazados eran demasiado lentos para acompañar a estos barcos capitales en este escenario. También hubo cruceros grandes que optaron por cañones de solamente 6 pulgadas, en torretas dobles o triples, buscando ser más eficaces contra  objetivos rápidos y cercanos pero no blindados, como los destructores.

Cañones aun más ligeros podían, usando ángulos de tiro elevados, servir como antiaéreos. Por eso una de las grandes misiones de los cruceros durante la IIGM fue la de servir como poderosa plataforma de armas antiaéreas. En particular  con cañones de doble propósito como la clase Dido, armados con cañones de 133 mm en cuatro o cinco torretas dobles. La Armada de Estados Unidos utilizó cañones de 127 mm en sus cruceros antiaéreos de la clase Atlanta, hasta con seis montajes dobles en torres cerradas (de tipo de destructor).

 A finales del siglo XX, la obsolescencia del acorazado dejó al crucero como el barco de combate de superficie más grande y poderoso (los  portaaviones no se consideran combatientes de superficie, ya que su capacidad de ataque proviene de sus alas aéreas embarcadas en lugar de las armas a bordo).  Pero el papel del crucero estaba en revisión cuando los límites con los nuevos destructores empezaron a desdibujarse gracias a la mejora de las torretas con cañones de alta cadencia de disparo y aparece como arma principal el misil. Es así como desparecen los grandes buques a favor de los pequeños destructores, el tema que desarrollaremos a continuación.

 

El crucero italiano Marco Polo en una postal de antes de 1917 (Wikimedia Commons) 

El destructor

Tal como comentamos al inicio, la aparición del torpedo se convierte en la principal amenaza para los grandes buques que usaban como primer vector las pequeñas lanchas torpederas(6) y luego el destructor, mientras que los submarinos siempre actuaron preferentemente sobre el tráfico mercantes que no sobre buques de la armada. Sin embargo, en su origen el destructor no fue un caza navíos, tampoco fue su principal rol durante las dos guerras mundiales, aprovechado como explorador por su rapidez y escasa visibilidad gracias a su baja silueta, enfocados a un papel de escolta en las flotas, convoyes o grupos de batalla y defenderlos contra lanchas torpederas y submarinos.

La motivación para su desarrollo era la de disponer de un contratorpedero capaz de poder acompañar a las escuadras y defenderlas de los torpederos enemigos, pues esta labor la realizaban pequeños barcos similares a los torpederos que no podían acompañar a las flotas en alta mar. Además de la velocidad, entre las características principales de estos nuevos barcos debía estar el tener una gran autonomía y capacidad de navegación oceánica, ya que deberían acompañar en sus largos viajes a los cruceros y acorazados a los que protegerían. Desde ese momento, hasta la Primera Guerra Mundial, su papel principal era proteger a la flota de los torpederos, así como realizar ataques(7)  con torpedos contra los acorazados enemigos. El papel de escoltar a los convoyes enemigos aún estaba lejos en el futuro.


Fernando Villamil (  (Wikimedia Commons) 

)


La idea original le corresponde al marino español Fernando Villaamil(8)  que solicitó proyectos a varios astilleros británicos y finalmente, en 1885, eligió el presentado por el astillero de James & George Thompson de Clydebank (Escocia). Bautizado como “El Destructor” entró en servicio en 1887 y tuvo influencia en el concepto y diseño de los destructores (destroyer en inglés) posteriores de la Marina Real británica. Siendo  considerado mayoritariamente el primer destructor de buques torpederos construido nunca, fue puesto en grada en 1886, con un desplazamiento de 380 t, equipado con un cañón (de construcción nacional) Hontoria de 90 mm, cuatro cañones de 57 mm, 2 cañones de 37 mm y 3 tubos lanzatorpedos.


El Destructor. Primer destructor del mundo (Wikimedia Commons) 


En 1899 la Marina Real británica ordenó la construcción de prototipos de destructores dotados de turbinas para su propulsión: el HMS Viper y el HMS Cobra. Estos fueron los primeros buques de guerra dotados de turbinas; para 1910, las turbinas habían sido ampliamente usadas por todas las armadas para sus buques más rápidos. Los británicos experimentaron con la propulsión alimentada por fueloil con la clase Tribal de 1905.

Los destructores fueron adoptando un modelo de casco largo y estrecho, con un calado relativamente bajo. La proa estaba elevada, primero con una cubierta bajo una especie de caparazón, luego con un castillo donde se encontraban unos  alojamientos de la tripulación. En estos inicios, los destructores ofrecían una muy baja calidad de vida a bordo, carecería de comodidad incluso para los primeros oficiales que carecían de la intimidad de camarote separado. Tras el espacio de la tripulación (1/4 a 1/3 de la longitud del casco), se encontraban las salas de máquinas, compuestas por calderas y turbinas. Sobre la cubierta se montaban a proa uno o más cañones de disparo rápido delante del puente; se añadían otros tanto a mitad del buque, como a popa. Los tubos lanzatorpedos se montaban en montajes múltiples a mitad del barco en las bandas.

Durante la Guerra Ruso-Japonesa, en 1904, se produce la primera victoria significativa de los destructores en combate, al dañar con sus torpedos a dos acorazados rusos en la batalla de Port Arthur.

Mientras que los enfrentamientos entre buques capitales fueron escasos durante la Primera Guerra Mundial, los destructores participaron continuamente en acciones de ataque y patrulla durante la contienda. El primer disparo de la guerra en el mar fue efectuado el 5 de agosto de 1915 por el destructor de la segunda flotilla, HMS Lance, en un enfrentamiento contra el minador auxiliar Königin Luise. Pero la primera baja de un submarino alemán por un destructor, fue la del U-19, embestido por el HMS Badger el 29 de octubre de 1914. Aunque el U-19 solo fue dañado, al mes siguiente, el HMS Garry hundió el U-18. El primer hundimiento por cargas de profundidad, tuvo lugar el 4 de diciembre de 1916, cuando el UC-19​ fue hundido por el HMS Llewellyn.

Destructor de la clase Churruca Lepanto que participó en la Guerra Civil por el bando republicano  y  probablemente fue uno de sus torpedos el que hundió el crucero pesado Baleares.(Wikimedia Commons) 


La tendencia durante la Primera Guerra Mundial, fue la de construir destructores cada vez más grandes y con un armamento más pesado. En este sentido se reforzó el poder del armamento de torpedos, pues la experiencia  había demostrado que en algunos casos se había perdido la oportunidad de dañar a buques capitales después de gastar este poder en una sola salva. Los destructores británicos de las clases 'V' y 'W' del final de la guerra, comenzaron a montar  seis tubos lanzatorpedos en dos montajes triples en vez de los dos o cuatro tubos de modelos anteriores y almacenando sus recargas cerca de la superestructura, permitiendo con ello la recarga en 15 minutos.

Durante el periodo de entreguerras se avanzó en la construcción de destructores más grandes y rápidos, especialmente dentro de la rivalidad franco-italiana en el mediterráneo. Como respuesta a los veloces cruceros ligeros de la clase Condottieri, la armada francesa construía la clase Le Fantasque de 1935 que podía alcanzar la velocidad de 45 nudos (83,4 km/h),  con cinco cañones de 140 mm y nueve tubos lanzatorpedos. Por otro lado, la armada de los EEUU, da un salto cualitativo con la clase Farragut(9) de 1934, un barco más grande y con habitabilidad mejorada que le valió el apodo de "goldplaters".

Al comenzar la IIGM, los avances de la aviación y del arma submarina harán que los destructores estuvieran mal equipados para combatir a sus objetivos, las armas antisubmarinas habían cambiado poco, y el SONAR (conocido  también como ASDIC) no se usa masivamente ni mejorado apenas hasta poco antes de la IIGM. Para ello fueron incorporando armamento antiaéreo, radar y armamento ASW (erizo) adicionales a sus cañones ligeros, cargas de profundidad y torpedos.

HMS Velox  (Wikimedia Commons) 



En esa época, los destructores ya se habían convertido en grandes y caros buques multipropósito. Las necesidades harán que aparezcan nuevos tipos de buques mas baratos y lentos especializados en la lucha antisubmarina con un desplazamiento más similar al de los primeros destructores, que en general se llamarán fragatas(10) en todos los ejércitos, menos en EEUU que serán denominadas escoltas (destroyer escort).  Por otro  lado, la Royal Navy, ante la urgencia de hacer frente a la gran amenaza de los numerosos submarinos alemanes, para ahorrar tiempo de construcción y costes, creó las más económicas corbetas clase Flower basándose en el diseño de un ballenero, que cumplieron bien su misión de escoltas oceánicos hasta que fueron desplazadas por las mejor diseñadas fragatas de la clase River.

Actualmente la base de todas las armadas son potentes buques con la denominación de fragata o corbeta, pero son otra historia(11).  No deja  de ser curioso que aquellos buques de vela que dejaron la impronta en las antiguas grandes armadas  para asignar a dos rangos actuales principales como  son capitán de fragata o corbeta, quedaran fuera de contexto en la primera mitad del siglo XX hasta que estos nombres reaparecen en barcos modestos y ahora cumplen cometidos principales como fue en sus últimas versiones, justo  anteriores de la creación de los acorazados.

Podría decirse que la aparición del acorazado acabó con las fragatas justamente cuando estos buques de origen humilde eran importantes navíos de guerra. Renacerán de forma igualmente humilde cuando desaparece el acorazado para convertirse nuevamente en importantes navíos de guerra.

También podría decirse que el  nombre del navío (fragata y corveta) creo el rango, y ahora el nombre del rango (capitán de fragata o corveta) ha creado el nombre del navío.

 

Fragata moderna española Cristóbal Colón F-105. (Foto de Diego Quevedo Carmona (tomada  de Wikimedia Commons)  


NOTAS ACLARATORIAS

 

1.-  El término dreanougth se usa para definir los barcos similares al original HMS Dreanougth que contaba con 5 torretas dobles, una a proa y dos en popa siguiendo el eje central del barco, más dos en la alas junto a la superestructura. La clase posterior denominados Superdreadnoughts disponían todas las torretas en la línea de crujía del barco, superponiendo algunas, pues así las tensiones estructurales eran relativamente bajas. Esta disposición permitía además que toda la batería principal disparase hacia un costado del barco, aunque no todas lo pudiesen hacer en la dirección de la marcha del buque. Esto también implicaba que el casco fuese más largo incrementanto el desplazamiento por el peso del blindaje, además de que un número grande torretas de cañones interferían con la distribución de las máquinas, razón por el que el HMS Agincourt, que montaba un número récord de 14 cañones de doce pulgadas, no se lo consideró un éxito.

 

Plano del HMS Dreadnought, puesto en servicio en 1906, publicado en el Jane's Fighting Ships. Mostrando la distribución del armamento en los primeros dreadnoughts ingleses. La batería principal se dispone en torretas gemelas, con dos en las «alas»; la batería secundaria, más ligera, se distribuyó alrededor de la superestructura. ( De Wikipedia  Commons)

 

2.- El número de acorazados (battleships) o cruceros de batalla (battlecruiser) quedaba reducido a 20 para el RU, 18 para EEUU y 10 para las otras potencias vencedoras de la IGM (Francia, Italia y Japón).

 

3.-  Estratégicamente, se supone que el ataque a Pearl Harbour vendría a provocar una respuesta americana para enfrentarse a una batalla definitiva. Recordemos que el éxito de la batalla de Tsushima es consecuencia de la última respuesta rusa. Pero Pearl Harbor no es un ataque tan debilitante a la fuerza de la USS NAVY  en el Pacífico, no se dañó a uno solo de los portaviones (buques capitales en el conflicto) ni se inutilizaron las instalaciones navales de Hawai.  En todo caso, era ingenuo que los americanos entraran en este juego cuando todo induce a pensar que estaban preparándose para el conflicto desde hacía tiempo.

 

4.- Las bombas colocadas con precisión podían hacer mucho daño en cualquier buque. El as “stuka” Hans-Ulrich Rudel consiguió destruir un crucero ruso con una sola bomba, como si fuese Skywalker contra la Estrella de la Muerte,  la introdujo en la sala de máquinas a través del hueco de una de las chimeneas.

 

5.- EEUU planteó la construcción de una clase Montana equivalente a la clase Yamato, pero sus quillas nunca fueron puestas en gradas; los cuatro acorazados de la clase Iowa completados fueron los últimos en ser puestos en servicio aunque con cañones de  16 pulgadas (406,4 mm).

 

6.- Buques torpederos hundieron el acorazado HMS Goliath en 1915, el austro-húngaro Wien en 1917 y el Szent Istvan en 1918.

 

7.- Los destructores se agrupaban en grupos de combates encabezados por un crucero ligero o un destructor líder, denominado en inglés  “flotilla lider” (siendo el término flotilla del español pequeña flota de barcos).  Algunos destructores hasta finales de los 30 se construyeron para este rol, debiendo disponer de espacio suficiente para el capitán de la flota y todo su equipo. Los norteamericanos que usaban símbolos de clasificación para el casco, usaban para el destructor normal las siglas DD; DL para los grandes destructores “flotilla lider”.

 

7.- Murió heroicamente en 1998, en Santiago de Cuba, combatiendo a borde del “Furor”, uno de los buques que había contribuido a diseñar, cuando estaba al mando de la escuadrilla de destructores de la escuadra de Cervera. 

 

8.- Son ya 5 las clases con este nombre, destructores todas menos la primera (el torpedero USS TB-11). El nombre es en honor al almirante Farragut, hijo del militar y marino español Jorge Farragut Mesquida que combatió contra el imperio británico durante la Guerra de Indepencia de los Estados Unidos adquiriendo la nacionalidad estadounidense. Cuando acabó la guerra, y gracias a sus méritos, se retiró del ejército de los Estados Unidos con el grado de comandante mayor.

 

9.- El término de destructor de escolta (escort destroyer) alude a potentes detructores de flota,  puede ser confundido con destroyer escort en ingles, que hace referencia a buques escoltas de mercantes particularmente de la IIGM,  de menor tamaño pero de mejores cualidades marineras que las pequeñas corbetas. Tenían capacidades antisubmarinas y eran lentos con motores diesel (los mercantes no marchaban a más de 10- 12 nudos), a veces podían portar torpedos. Durante la IIGM los EEUU siguieron denominando como tales a buques rápidos similares a las llamadas fragatas de otros países, término no usado en la armada de los EEUU hasta la reclasificación de 1975 para normalizarla a la OTAN. Así se pasó de los símbolos de clasificación de casco DE o DEG, a FF o FFG.

 

10.-  Según Agustín Ramón Rodríguez González, coautor con Juan Luis Coello Lillo de La Fragata en la Armada Española. 500 años de Historia. Atribuye la invención de este buque de guerra clásico a los trabajos que comenzó  Bazán “el viejo” y le  siguieron sus hijos, el gran Don Álvaro de Bazán “el mozo”, por no decir “el grande” y de su hermano Don Alonso, para resolver el  problema de proteger a las naos en las grandes travesías oceánicas frente a los buques más pequeños y ágiles de los corsarios. Para este cometido no podía usarse como base la Nao, un barco robusto pero carente de agilidad, tampoco la galera que era el barco de guerra ideal en el mediterráneo pero no servía para el oceano. La solución se encontraba  en buques más pequeños, y así fueron naciendo los “galeoncetes”, “galizabras” (tomando como base a unos pesqueros llamados zabras”) o finalmente, las “fragatas”, por analogía con las embarcaciones menores que acompañaban a las galeras.

 

Por tanto el nombre es anterior y parece derivar, según el autor, de la palabra original  griega, “afracta” o “sin cubierta”, referida a las más pequeñas embarcaciones de la familia de la galera, con apenas una docena de remos por banda, una treintena de marineros (que accionaban los remos pues en ellas no había forzados) y otros tantos soldados si iban armadas en guerra. De las que unas cuarentena de ellas luchó en Lepanto.

 

 Será en los astilleros del Flandes de la corona española donde se acabe perfilando el buque que será copiado en el siglo XVII, por Holanda, Francia y finalmente Inglaterra. Tomando en muchos caso el nombre.

 

No está claro el origen de la corbeta pero parece su desarrollo es parejo a la fragata que fue creciendo en tamaño, siendo la corbeta de tamaño inferior.

 

En todo caso la impronta de los nombres de estos dos barcos se mantendrá en muchas armadas como los rangos de capitán de corveta y capitán de fragata actuales.

 

Ejemplos en países OTAN:

 Bélgica (Flamenco ):              Korvetkapitein, Fregatkapitein

 Francia y Bélgica (francés): Capitaine de corvette, Capitaine de frégate

 Italia:                                      Capitano di corvetta Capitano di fregata

 Montenegro                            Kapetan korvete, Kapetan fregate

 Portugal                                  Capitão-tenente, Capitão de fragata

 Alemania                                Korvetten­kapitän, Fregatten­kapitän

 Eslovenia                                Kapitan korvete, Kapitan fregate

 

11.-   Las capacidades de estos buques son altas, dotados de alta tecnología: misiles superficie-aire, antibuques, antisubmarinos,  superficie-superficie, tienen capacidad  portahelicoptero… son por tanto buques sofisticados y caros. Por ejemplo la fragata Cristóbal Colón (F-105) española tiene el desplazamiento de 6.300 t y para la OTAN es calificada como destructor, aunque su desplazamiento sería similar a la clase de cruceros Dido de la Royal Navy usado durante la II GM.  Una ponderación de las capacidades y versatilidad de la F-105  la hace notablemente superiores al  rol de cualquier crucero de la IIGM.

viernes, 6 de junio de 2025

ARTIFICIAL PROGRESO SOSTENIBLE

Al igual que todos los seres vivos, los humanos somos dependientes del medio físico y cualquier cambio nos afecta. Por suerte, los cambios naturales son bastantes predecibles, es por ello que ha sido posible el rápido desarrollo científico y tecnológico. No ocurre lo mismo con nuestras sociedades, somos totalmente impredecibles, movidos por un complejo mundo de ideas en las que aparecen ciertas paradojas. Entre ellas se da la circunstancia que hemos desarrollado nuestra cultura modificando el entorno natural usando la técnica como herramienta. A este proceso le hemos llamado progreso y es considerado como un gran logro. Como en el momento presente somos conscientes del deterioro ambiental, confiamos en esa misma técnica para modificar lo modificado, cuando el proceso no deja de ser el mismo, aunque más acelerado, lo que nos aleja más de ese entorno predecible propio de nuestra especie. El verdadero motor de este proceso es económico, se entiende que es la causa por la que nuestros gobernantes no pueden levantar el pie del acelerador, expresado como “desarrollo sostenible”. Aunque esto no depende solamente de sus decisiones, ni es predecible, ya que todo lo que envuelve a la economía es totalmente inseguro por estar al albur de decisiones de personajes con motivaciones incluso irracionales: nacionalismo, religión, etc.
Foto atribuida a Michelangelo Buonarroti en Pexels


¡Cuando se imaginó que el pacifismo verde europeo se transmutara en belicista y pronuclear! Independientemente de las motivaciones racionales o irracionales. Lo evidente es que el uso del miedo reduce la reacción del contribuyente cuando se le exprime, para satisfacer a los lobbies de la industria militar estadounidense, y la culminación última sería la toma del control de la soberanía nacional por los financieros a través de la deuda. El paradigma actual de este proceso de actualización económica es “la lucha contra el cambio climático” convirtiéndose en un principio fundamental para los discursos de los gobiernos. Lo delirante es que se use a la ciencia (la física, básicamente) como coartada política, para anular a los críticos tildándoles de negacionistas de la ciencia. Cuando traduciendo el discurso se entiende perfectamente que se habla básicamente del principio de que el flujo económico no puede pararse. Como discurso económico es necesariamente discutible pero al anularse la crítica (contrario al método científico y poco democrático) lleva a la esquizofrenia a la sociedad en su conjunto, el resultado es imprevisible, como el reciente apagón. Pues temerariamente se antepone la ideología a la seguridad para que finalmente (e irónicamente), se restituyera el sistema eléctrico incremento el consumo de combustibles fósiles. NIÑOS EN UN CHARCO En nuestra sociedad, plena de derechos y bienestar, podemos ser totalmente extravagantes en nuestras relaciones sociales, irracionales en nuestras decisiones cotidianas, como niños en un charco, locos pero inofensivos, gracias a que sabemos separar el lado hedonista y divertido, por lo que nadie quiere que el médico que te ha de curar, el arquitecto que haga tu casa, el policía o el abogado que te ha de defender, sea un poeta, filosofo o artista antes que un profesional. Por tanto, nos dejamos seducir por aquellos capaces de crear una realidad paralela, un relato colorido que toque nuestro sentimiento sin que esto necesariamente nos perturbe. Salvo cuando en lugar de personajes inofensivos que buscan prestigio y admiración social, codician el poder total: tanto material como moral sobre ti. Nos dejamos narcotizar y arrastrar por estos políticos pupulistas que, como grandes artistas de la farsa, se crean el personaje que aúna al poeta de las ideologías, sofista intelectualoide, lider mesiánico y patriota de banderas. Estos actores y directores se alían con los productores de la farsa, aquellos que ostentan el poder económico. Todo este sistema se vale de la propaganda en los medios, mediante una cohorte de esbirros y secuaces canceladores, señaladores, creadores de contenido, constructores de mundos ideales, de relatos maniqueos que generan en ti la necesidad de salvación de desastres por venir de cualquier origen, sean los otros (de otra ideología, credo o nacionalidad), o de las fuerzas de la naturaleza (virus incluidos). Es así como se configura una experiencia vital en la que lo importante no es la realidad material tangible, sino un ideal que generalmente se proyecta como “el futuro”. Vivimos el sueño de las promesas y le llamamos progreso. Este inconformismo con la realidad nos arrastra al charco, en donde nuestra ansia de alcanzar nuestros sueños nos confunde y puede hacernos perder los que con esfuerzo nos legaron nuestros padres. Aquello que es dado, no tiene valor. Lo tiene (valor comercial) solamente lo que ha sido creado aunque sea una burda copia de lo que la naturaleza nos regala, tan simple como el agua mineral etiquetada y comercializada. Puede ser completamente inútil; no importa, es arte. Puede ser estúpido o irracional; no importa, como es algo nuevo es progreso. Detrás subyace la actitud de un ser motivado por lo irracional, vanidoso y codicioso. Un antropólogo identificó en un hallazgo lítico de hace cientos de miles de millones de años, la primera muestra de vanidad representada por un punta de lanza tallada en sílex tan extraordinariamente grande como inútil. Este sentido peyorativo ¿No será porque se trataba de un Homo erectus? ¿En qué se diferencia de la categoría actual de arte? (imagen mano con agua escurriendo El que mucho abarca, poco aprieta. Y el inconformista que rebasa su capacidad suele terminar perdiendo lo que creía tener asegurado) En todo caso este antepasado nuestro era plenamente consciente de su realidad física, no podía ser de otra forma, le era vital para poder sobrevivir. ¿Son nuestros jóvenes plenamente conscientes de su realidad física? En su mundo lo más básico está asegurado, se compra en el supermercado y para ellos no hay conciencia del origen natural, todo viene de una fábrica. Esta falsa imagen se hace realidad cuando consumen básicamente alimentos procesados, de tal forma que admitirán cuando llegue la carne artificial o la harina de grillo. Son urbanitas, que desprecian al mundo rural y a su gente, que viven el progreso como una superación de la forma de vida tradicional y que han asimilado el principio deletéreo de éste con todo eso que no requiere de nuestra mano y carece de valor comercial como el aire, la flora, la fauna, el agua y el paisaje; sin embargo, el coste de su restitución es inimaginable. ¿O no? Depende de lo que entendamos por coste. Pues el mercado sí que pone a todo valor y entonces recordemos que uno de los principios más amorales del capitalismo es el de producir escasez para incrementar el negocio. Pongamos por caso que sea la energía, el alimento; pero también puede ser el suelo, el agua, hasta el mismo paisaje, fauna, flora. Tal vez hasta el aire que respiramos si se lo proponen, ¿no ocurre ya con una parte de él? Analice como detrás de cada buena noticia ambiental, hay una realidad oculta y silenciada a veces tan obvia como contradictoria. Es así que en las nuevas energías calificadas como verdes, solamente se valora su lado positivo y global (reducción de gases de efecto invernadero) pero no todo el impacto que suponen sobre la naturaleza y el mundo rural local. Aquí, como decía Saint Exuperi: Lo esencial es invisible. Un ejemplo. Recordemos como los medios celebraban el nacimiento de linces de biberón mientras se ignoraban los espontáneos nacimiento de linces en libertad en Sierra Morena. La gran diferencia entre ambos, además del elevado coste del primero, es que lo más valioso, las relaciones ecológicas, ni se ven ni están en el mercado. De nada serviría salvar la parte genética del animal si no conservamos su ecología. En consecuencia, si aún hay linces será principalmente porque disponemos de estos ecosistemas con animales reproduciéndose de forma natural. Repito, solamente se valora lo que está en el mercado. ¿Cuál es la última consecuencia de la mercantilización de la naturaleza? Los sentimientos a veces nublan la razón. Ante el sufrimiento de Bambi se condena la caza, cuando la mayor matanza es privarles de su hábitat. En este sentido resulta grotesco que se ponga el énfasis en el calentamiento global y no en la profunda modificación de los ecosistemas y la alteración de las relaciones ecológicas. ¿Si esto vale para el lince porque no para el ser humano? Lo irónico es que los jóvenes urbanitas usen el eslogan de “salvar el planeta” cuando lo cierto es que el planeta les sobrevivirá, y serán ellos las principales víctimas de la desnaturalización. Van con orgullo al transhumanismo, a la alienación del ser humano dentro de una cárcel de hormigón asfalto. Si hubiese consciencia, buscaríamos los beneficios de volver a la sencilla vida en el ámbito rural y exigiríamos la igualdad de oportunidades para poder vivir conforme los ritmos de la naturaleza, en el campo. Por eso es evidente que el enfoque debería centrarse en aquello que tenemos cercano, en la planificación territorial de nuestros campos para que continúen manteniéndonos. Al contrario, las políticas globalistas que posibilitan mantener o incluso incrementar nuestros consumos en base a explotar los recursos lejanos conducirán a una desastre ambiental global, mientras nos lamentamos por el planeta ¡vaya ironía! ¿Acaso estamos ciegos? La mejora ambiental que ha producido nuestra legislación tiene como contrapartida deslocalizar la producción y contaminación en otros lugares de los que nos proveemos de alimentos, material primas y productos industriales. Es así, puro cinismo ambiental global. Cuando la porquería está lejos de casa, no nos importa. El progreso como ideología, se construye en el paradigma de la obsolescencia, requiere del continuo cambio para que no te conformes y compres lo nuevo, engañándote con una ilusión de que será mejor y luego te llevas el chasco, como el nuevo sistema operativo que se cuelga, o el nuevo coche al que le aparecen unas averías electrónicas que para ti no tienen sentido. Entonces, no parece extraño la importancia que se le da a la IA, pues parece imperioso que aparezcan máquinas para la toma de decisiones. Lo que demuestra lo mucho que se ha rebajado la calificación de inteligencia. (imagen planeta o luna. Y dicen que si perdemos la habitabilidad terrestre encontraremos cobijo en otros planeta. Es ridículo pensar que nuestra sociedad sea incapaz de mantener su casa (La Tierra), que ha sido regalada por nuestros padres y que seamos capaces sin embargo de habilitar una nueva en otro planeta. ¿Estamos locos o nos tratan como imbéciles? UE. ESCENARIO BÉLICO En geopolítica no puedes jugar de farol, las cartas están boca arriba. Sería estúpido mostrarte desnortado y débil ante un enemigo, más aún crearte enemigos innecesarios. Entonces, dado que no son estúpidos, habría que concluir que nuestros dirigentes de la UE demuestran que no defiende a los europeos. En todo caso, estos que tan estirados se mueven, son simples marionetas de los verdaderos poderes económicos y estos del caos. Pues “caos” es la incertidumbre donde no se observa una relación lineal entre causa y efecto. Tanto que el aleteo de un mariposa forme un huracán a miles de kilómetros, como que un “accidente” o un atentado de falsa bandera, haga estallar la caldera de un Maine, conduciendo a un conflicto armado. ¿A qué les suena tantas referencias al nazismo y a la URSS en el conflicto ucraniano? Se suele olvidar que durante la segunda guerra mundial entre los aliados contra la Alemanía nazi se encontraba la URSS a sabiendas que luego se convertiría en el enemigo. Por tanto, no es cierto que los aliados defendieran la democracia contra el totalitarismo, pero hubiera sido poco inteligente enfrentarse a la vez a Hitler y Stalin, cuando sabíamos que ambos acabarían enfrentándose a pesar de tener una alianza que les permitió invadir y repartirse Polonia. Por eso permitieron que las tropas soviéticas realizaran crímenes horrendos contra los polacos, se anexionaran las repúblicas bálticas y lo intentaran con la inocente Finlandia. En definitiva, la URSS hizo tanto como Alemania para merecer la declaración de Guerra. El resto, ese discurso de los aliados como los salvadores de las libertades, no es más que un relato posterior. Para España, Rusia y Ucrania son países de la Europa del Este. Tenerlas como aliados o enemigos no nos trae tanto beneficio como ser neutrales con ellos. Nuestros intereses geoestrátegigos se contraponen a los intereses de los países de UE vecinos de Rusia o, a los económicos de digamos la UK. Aún más, la política del Gobierno a este respecto sirve para echar más tierra sobre la dañada Constitución Española, la verdadera garante de nuestra democracia. ¿Es que ningún político va a sacar a relucir el artículo 8 CE? Nuestras fuerzas armadas son defensivas, y únicamente para asegurar nuestra independencia e integridad territorial no de las de otros países ni mucho menos de valores políticos. Los dos infames de bigotes también usaron el subterfugio de la defensa para atacar a personas, colectivos o países pacíficos ¿vamos a convertirnos en policías del mundo? ¿Es el uso de la violencia lo que proclama la señora del pony? ¿Acaso los EEUU cuando van de sheriff no buscan siempre intereses económicos? Que la ideología atenta contra el bienestar del pueblo, incluso cuando el pragmatismo así lo evidencia, es evidente en el caso del enfrentamiento entre Alemania y la URSS durante la IIGM, dada la muy fructífera alianza comercial que para ambas potencias había justamente antes. Así se se entendió como necesaria crear la CECA como el primer paso para evitar una tercera guerra entre Francia y Alemania. La actitud agresiva de la diplomacia no es una actitud independiente de un modo de hacer política basada en posiciones alejadas del bien común por su radicalidad y falta de pragmatismo. Como es la forzada apuesta por las renovables y el coche eléctrico, como tiro en el pie europeo, hundiendo una de nuestras principales industrias, haciéndonos dependientes de China así como de otros países “pobres” que van a producir los alimentos que dejamos de cultivar con la pérdida de competitividad de nuestra agricultura y la “panelización“ del campo. Todo lo que mueve un país (mano de obra) o lo defiende, depende ahora de gente joven de cultura no Europea (así cayó la gran Roma) por la falta de reemplazo de población europea. Se dice que no podemos tener hijos por una cuestión económica (mire la natalidad de los países pobres), incluso que no es bueno traer hijos al mundo por el incremento del consumo. Son sandeces, cuando lo que hacemos es suplir nuestros hijos por perros y gatos, las mascotas son parte de nuestra familia que ya cuentan con su propia ley. Por tanto, en los hogares sin niños se consumen alimentos equivalentes a las necesidades de familias con varios hijos. Perros y gatos son cuidadas con alimentos iguales (literalmente los mismos) al de nuestra alimentación en calidad y origen, además de toda una industria de los complementos como chuches, juguetes, ropas etc. Requieren de clínicas veterinarias, todo tipo de material sanitario (vacunas, medicamentos), peluquerías, parques, etc. Puesto que no hay política, ni se espera, para sostener nuestro futuro como pueblo y cultura por la falta de reemplazo de población europea. Debemos colegir que no nos importa el futuro de Europa, pero si el futuro del planeta. ¿no es sorprendente? FANATISMO Y CAOS Estamos rodeados de fanáticos, son familiares, amigos y vecinos. Es un fenómeno social, nadie reconoce su fanatismo cuando estás dentro, los fanáticos son los otros. Así que podríamos decir que todos reconocemos el fanatismo ajeno y que nadie quiere que le impongan el fanatismo de otros. Si observamos la definición de fanatismo de la RAE: apasionamiento y tenacidad desmedida en la defensa de creencias u opiniones, especialmente religiosas o políticas. Por tanto, el fin de los principales fanatismos es su imposición social. En consecuencia, una sociedad demócrata y avanzada ha de protegerse para evitar el triunfo de los fanáticos. Es más, si consideramos que ha habido un progreso social, tendría que haberse encontrado e implantado medidas en el sistema para evitarlo. Me temo que repasando la historia reciente de Europa, no lo parece, recuerden como una minoría de bolcheviques en Rusia o nazis en Alemania forzaron a la sociedad a su fanatismo. Ya se sabe, cuando los que te rodean comulgan, es difícil escapar a la comunión. Lo más evidente se encuentra en la historia de las religiones. Pero dejemos de lado los credos, y centrémonos en la política dentro de un sistema democrático. Tendríamos que retroceder a la antigua Grecia en donde encontramos además de los orígenes de ciertos conceptos básicos de la democracia, la importancia del dialogo como medio para convencer a través del razonamiento. No es que los filósofos y especialmente los matemáticos, nos señalen el método, también entre ellos hubo fanatismos. Pero, parece que por primera vez en la historia aparece como principio el convencimiento por medio del dialogo y la razón. Siendo así que el parlamentarismo se nos presenta como el lugar en el que mediante el dialogo y haciendo uso de la razón se lleguen a acuerdos para legislar mejor en beneficio del pueblo soberano. ¡Ja! Es evidente que no es así, por lo que el sistema falla totalmente. Pudiendo llegar a un punto en el que lo que llamamos democracia no se parezca ni en las formas. Pensará usted que, vale con el diagnóstico, pero lo importante es la solución. Yo no la tengo, pero si que, como ocurre con problemas como el alcoholismo, el primer paso es admitir el problema. Cuando seamos conscientes todos, especialmente afiliados o simpatizantes, y exijamos que no queremos votar a fanáticos, será el principio de corregir el camino. Todos sabemos que la mayoría de la ciudadanía no es fanática, aunque bastante tolerante. Cabría plantear cómo diferenciar el fanatismo que destruye la convivencia de lo que es un respetable punto de vista ideológico. El primer rasgo distintivo es querer, des la minoría, imponerse sobre la mayoría, violentando la soberanía popular mediante normas. Sería un rasgo antidemocrático demasiado tolerado por los propios simpatizantes y totalmente admitido por nuestro sistema (en España se legitima un gobierno con el voto de no más de 3 de cada 10 del censo electoral). Otra característica es la imposición moral acompañado de una supuesta pedagogía correctora. Esta última se realiza con la propaganda en los medios y se lleva al curriculum escolar. Si analizamos la realidad actual en nuestro país o en la UE, parece evidente que estamos inmersos en el fanatismo mas delirante. Principalmente lo observamos con una cultura extraña (originada en las élites intelectuales de las universidades norteamericanas) como la woke, perfecta para definir el abuso de la minorías, ya que pretende imponer normas a la mayoría desde su minoría fanática, además de centrarse en los derechos de ciertas minorías. Esta cultura entra con el gobierno de Zapatero y es ahora cuando se evidencia con leyes sectarias como la “Ley del sí solo es sí” o la “Ley del bienestar animal” que además, han resultado fiascos al conseguir lo contrario a lo que proclaman. En el caso de la UE, es principalmente la normativa ambiental y agrícola que parece muchas veces dictada por un enemigo de Europa para hundirnos. Pues nos imponemos restricciones para un problema global como prohibir los coches de combustión cuando nuestra repercusión es prácticamente irrelevantes a nivel global, no así el daño a la industria del automóvil. Pero incluso más irracional es la política energética, principalmente de Alemania que ahora quema literalmente carbón porque no ha sido capaz de tener una estrategia de descarbonización realista. ¿Ahora pretende que se le solucione el problema con el hidrógeno español? Me temo que, igual que con el coche eléctrico apuestan a una ruleta pues no tenemos aún la tecnología adecuada para que esto funcione. En el caso español lo hemos visto con el apagón, que ha sido claramente por anteponer la ideología. Puesto que no es producir los kilowatios necesarios de renovable, es conseguir cubrir las demandas mientras el sistema se mantiene estable, sin apagones o sobresaltos. Cosa fácil de obtener con la convencional (térmicas, ciclo combinado de gas, hidroeléctrica y nuclear), algo más difícil con eólica y muy difícil con fotovoltaica. Recordemos que esta última ha crecido mucho en los últimos años incluso en los tejados de nuestras casas, que están conectados a la red eléctrica. La mayor muestra de fanatismo es la imposición de que todos los coches sean eléctricos a partir de 2035. Se trata de un asunto muy trabajado, es normal que haya sido bastante asimilado por la opinión pública, además que se reviste de un halo científico que realmente es engañoso, no se trata ciencias físicas, sino política económica, algo totalmente discutible. Porque, no nos engañemos, la política económica es un metadrama cuyo guión es una metamentira, en el que los mismos actores condicionan su papel con su actuación. En geoeconomía, los poderosos aspiran a crear la profecía autocumplida. Ya que nos vamos a referir a las políticas energéticas, les recuerdo que en la década de los 70 tuvimos la “gran crisis del petróleo”. Desde ese momento se ha alertado continuamente del fin del petroleo y ha sido el calentamiento climático el que ha dejado de lado este discurso por el nuevo.

NEGACIONISMO ECOLÓGICO

  LA CAUSA QUE ESTÁ DETRÁS DE LOS GRANDES INCENDIOS FORESTALES Esta es la opinión de ingeniero forestal que ha trabajo durante tres décadas ...